Lo vi y supe que todo podía pasar

¿Ver o cerrar los ojos?.

Más difícil es saber que se está viendo, y si eso que ves te está viendo a ti.

Vi a un hombre mirar a otro hombre con tal grado de ternura y deseo que jamas he visto entre un hombre y una mujer.

Vi a un amiga que creía perdida volviendo a mi y llenandome con su alegria otra vez.

Vi como una mariposa volaba directo hacía mi, vi como se posaba en mi regaso por unos segundos, haciendome entender que las cosas son tan mágicas. Esos instantes que estuvo sobre mi, ese insecto tan frágil y diminuto me hizo sentir tan pequeña y vulnerable como no me había sentido en años. ¿Como algo que puede deshacerse en mi mano me hizo sentir tan desvanecida?

Vi a un hermano mirarme con odio y dolor, y lo peor, es que me vi a mi misma respondiendole esa mirada con odio y dolor.

Vi a una mujer con una vida en sus entrañas; acariciando su vientre, sentí esa vida en mi.

Vi a tres hombres unidos más allá de lo que ellos pensaron que estarían.

Vi decenas de asesinos de terno y cobarta, riendo, brindando y sobandose el lomo dentro de una burbuja.

Vi un hombre que con cada palabra que salía de su boca me llenaba de deseo.

Vi muchas cosas, siento rabia de lo que aún no he podido ser capaz de ver y espero con ansias las miles de imagenes que me restan, mi exaltación aumenta al darme cuenta que entre más veo, más me doy cuenta que las vacas vuelan.